Del Eden a la Eternidad: Semana 4

Guía del Líder

¿Qué son los profetas? Fueron elegidos por Dios para ser portavoces y comunicar su voluntad al pueblo. Los profetas debían acercarse a Dios, escuchar su voz y conocerla. Dios nos llama a hacer lo mismo: necesitamos dedicar tiempo a escuchar su voz en silencio. Esta semana aprendimos del profeta Samuel que escuchar no se trata solo de oír, sino de responder. El profeta Miqueas lo resumió así: «¡Él te ha mostrado, oh mortal, lo que es bueno! ¿Y qué es lo que espera de ti el Señor?: Practicar la justicia, amar la misericordia y caminar humildemente ante tu Dios.» (Miqueas 6:8). Samuel nos da un ejemplo de cómo escuchar y responder a la voz de Dios, y Miqueas nos recuerda qué hacer una vez que la hemos escuchado.

Qué necesitarás:
Una Biblia o tu aplicación de la Biblia, un cuaderno, un bolígrafo y un resaltador
( Los versículos resaltados a continuación están enlazados para que puedas acceder a ellos fácilmente durante tu tiempo de estudio.)

 

Inicio

Líder: Esta sección está diseñada para iniciar conversaciones, examinar la verdad de Dios y aplicarla a nuestra semana. Los líderes de Grupos de Vida no deben asumir que todos en su grupo son seguidores de Cristo. El hecho de que participen en un Grupo de Vida demuestra que tienen cierta disposición para conocer más y explorar. Ora para que el Espíritu Santo obre y permite que Él te guíe también.


1.     ¿Eres de los que deben llenar el silencio o te sientes cómodo con el silencio? ¿Alguna vez has deseado que alguien te dijera qué quiere Dios que hagas en una situación?

Líder: Esta pregunta puede ayudar a iniciar la conversación sobre la tensión que sentimos entre querer respuestas rápidas y aprender a esperar la voz de Dios. A algunas personas les incomoda el silencio; puede resultar incómodo. Pero el silencio es a menudo donde Dios obra con mayor claridad. Quizás puedas practicarlo en el grupo de vida hoy.

 

2.     Lean Deuteronomio 18:18-20. ¿Cuál es el peligro de afirmar hablar por Dios? ¿Por qué crees que la gente de hoy en día se apresura a decir: "Dios me dijo..."?

Líder: Este gran llamado de Dios trajo consigo una gran responsabilidad. Dios toma su Palabra en serio. Podemos ayudarnos a nosotros mismos y a los demás al guiarlos hacia las Escrituras en lugar de hacia la opinión.

 

3.     Lean 1 Samuel 3:1-7. ¿En qué se diferencian las cosas ahora en comparación con los tiempos en que la Palabra de Dios era escasa? ¿Por qué crees que Samuel aún no conocía al Señor? Aunque tenemos la Biblia, ¿por qué crees que a tantos les cuesta escuchar a Dios? ¿Cómo se compara la escasez de la Palabra de Dios en la época de Samuel con la sequedad espiritual que a veces experimentamos hoy?

Líder: Quizás Samuel aún no reconocía la voz de Dios porque aún no lo había experimentado personalmente. Hoy, la palabra de Dios no es escasa: tenemos las Escrituras, el Espíritu Santo y la comunidad de creyentes. Pero a veces actuamos como si su voz fuera escasa porque no nos detenemos a escucharlo.

 

4.     Lean Juan 10:27-28 y 1 Samuel 3:8. ¿Cuál es uno de los mayores deseos de Dios para nosotros? ¿Por qué es tan importante aprender a escuchar la voz de Dios en lugar de preguntar siempre a los demás? ¿Por qué a veces preferimos preguntar a los demás qué quiere Dios en lugar de buscarlo nosotros mismos? ¿De qué maneras has aprendido a discernir la voz de Dios en tu propia vida?

Líder: Dios desea tener una relación con nosotros; no quiere que dependamos solo de líderes espirituales u otros para escucharlo. Así como las ovejas conocen la voz de su pastor, estamos invitados a reconocer Su voz personalmente.

 

5.     Lean 1 Samuel 3:9-11. ¿Por qué Dios esperó tres veces a que Samuel escuchara? ¿Podrías compartir alguna ocasión en la que Dios te habló en silencio? ¿Alguna vez ignoraste o te perdiste la guía de Dios la primera vez? ¿Qué sucedió? ¿Cómo podemos entrenarnos para estar más atentos a Su voz?

Líder: Dios es paciente como lo fue con Samuel. Nos invita constantemente a responder, pero no nos obliga. Su persistencia demuestra su amor por nosotros y su deseo de que lo conozcamos.

 

6.     Pasos de Acción: ¡Esta semana, ten calma! ¡Pídele a Dios que te hable y dile que estás escuchando! Dedica tiempo a Su Palabra para encontrar las respuestas en lugar de siempre preguntarle a alguien más.

Un análisis más profundo (opcional): Lean Miqueas 6:8 y 1 Reyes 19:11-13. ¿Cómo se relaciona este versículo con lo que aprendemos de Samuel? ¿Por qué es importante que aprendamos no solo a escuchar la voz de Dios, sino también a obedecerla viviendo con justicia, amando la misericordia y andando humildemente con Él? ¿Por qué crees que Dios a menudo prefiere el "suave susurro" en lugar del dramatismo? ¿Cómo se compara esto con la historia que acabamos de leer en 1 Samuel? ¿Qué distracciones te dificultan escuchar el susurro de Dios?