Guía del Líder
La fe es uno de los aspectos más importantes de nuestro caminar cristiano con Dios. Esta semana veremos cómo tener una “fe activa” y cómo hacer crecer nuestra fe en Dios.
Lo que necesitará: Una Biblia o su aplicación de la Biblia, un cuaderno, un bolígrafo y un marcador. Los siguientes versículos resaltados para usted están enlazados para acceder a ellos fácilmente durante su estudio.
Inicio
Líder: Esta sección está diseñada para iniciar discusiones, examinar la verdad de Dios y aplícala a nuestra semana. Los líderes de grupo de vida no deben asumir que todos en su grupo son seguidores de Cristo. Como él/ella participa en un grupo de vida, puede estar abierto a conocer más y explorar. Ore para que el Espíritu Santo trabaje y deje que Él también lo guíe.
1. Comparte un momento en el que tuviste una fe activa, ¿en el que quizás hayas salido creyendo que Dios haría algo?
Nota para el líder: Esto puede ser algo pequeño, como orar con alguien en el trabajo, invitar a alguien a un servicio o intentar algo nuevo en la fe.
2. Lea Hebreos 11:1-2. ¿Qué es la fe y por qué es tan importante vivirla en nuestra vida diaria? ¿Cómo obtenemos la “aprobación” de Dios?
Nota para el líder: Hebreos, capítulo 11, nos dice qué es la fe y nos da ejemplos de “héroes” de la fe. Ellos vivieron según ello, siguieron a Dios según ello y obtuvieron la aprobación de Dios. “Porque por él los pueblos de la antigüedad recibieron su alabanza.” (Hebreos 11:2, NVI)
3. Lea Hebreos 11:6. ¿Qué nos enseña este versículo acerca de no tener fe? ¿Es suficiente creer que Dios existe? ¿Cuál es el resultado de creer que Él nos recompensa por nuestra fe y por buscarlo?
Nota para el líder: En el mensaje, escuchamos que no solo creemos que Dios existe, sino también que Él recompensa a quienes lo buscan o lo persiguen. Dios quiere que vivamos una vida sobrenatural, con una mentalidad de creer que Dios todavía responde nuestras oraciones y todavía realiza milagros en nuestras vidas. Sin fe no podemos agradar a Dios.
4. Lea 2 Crónicas 16:9. En este versículo, ¿qué clase de persona busca Dios? ¿Cuánto de tu corazón está buscando a Él? Vuelva a mirar Hebreos 11:1-2. ¿Por qué es importante aferrarse a la esperanza mientras los sueños que Dios nos dio parecen no estar progresando? ¿Qué lugar, si es que hay alguno, ocupan el trabajo duro, las demoras y los problemas en el logro de los sueños que Dios nos ha dado?
Nota para el líder: En este versículo aprendemos qué tipo de persona Dios apoyará firmemente: una persona completamente entregada. Anímense unos a otros que como escuchamos en el mensaje del fin de semana.
“Los grandes sueños requieren mucho tiempo”, y ahí es donde entra la esperanza. Los “Héroes de la Fe” persiguieron los planes y sueños de Dios para sus vidas, no los planes de otras personas.
Abraham no sabía dónde iba ni llegaría a ver la promesa. Creyó y confió en Dios en que sucedería. Los grandes sueños requieren trabajo duro. Te encontrarás con problemas y retrasos, pero al igual que Abraham, Isaac, Jacob y José, debemos mantener la fe, seguir creyendo.
5. Lea Marcos 9:22-24. En estos versículos, ¿con qué lucha el padre? ¿Cómo responde Jesús? ¿Esto sucede a menudo en nuestra vida cotidiana? ¿Cómo crees que Jesús responde a nuestra honestidad acerca de nuestra incredulidad a veces? ¿Cómo podemos crecer y ampliar nuestra fe?
Nota para el líder: Recuerde a su grupo que Dios es misericordioso y paciente con nosotros en nuestras dudas. Si Él fue paciente con la “poca fe” de los discípulos y aun así los usó para hacer Su obra, entonces Él también estará con nosotros. Dios conoce nuestros corazones y pensamientos. En esta historia, aunque el padre estaba luchando con su fe, porque admitió humildemente su incredulidad y pidió la ayuda de Jesús, Dios aún así sanó a su hijo.
7. Pasos de Acción: Así como la semana pasada se nos pidió que pasáramos tiempo de rodillas, tenemos el desafío de hacerlo nuevamente. Esta vez, ora humildemente de rodillas con Su Palabra expuesta frente a ti, diciendo: “Dios, quiero que hagas en mi vida lo que veo en estas páginas.” Dígale a Dios que cree, pero también admítalo si necesita ayuda con cualquier incredulidad. Sea sincero con Dios al respecto. Él ya nos conoce y está lleno de gracia y misericordia para con nosotros. Pídele a Dios que te dé un gran sueño. Y luego actúa, ¡no esperes! Ora, pide, y haz. “La fe es como un músculo; debes usarlo y estirarlo para que crezca.”
Profundizar
8. Lea Génesis 37: 5-11, Génesis 37:24, Génesis 37:28 y Génesis 37:36. ¿Cuál fue el gran sueño que José tuvo con Dios? ¿Cómo se sintieron los demás acerca de su sueño? ¿Parecía que su sueño se haría realidad, considerando cómo iban las cosas?
Nota para el líder: José tuvo un sueño literal, que Dios le dio, que le mostraba su futuro. Mientras leen y analizan estos versículos, hablen sobre cómo debió haberse sentido él y cómo parecía en ese momento que su sueño no iba a suceder. Como mencionaron en el mensaje del fin de semana, José es llevado al pozo. Luego fue vendido como esclavo. Sólo Dios podría tomar esta situación y usarla para un plan y propósito.
9. Lea Génesis 39:2, Génesis 39:19-21. Aquí vemos que el Señor estaba con José y lo bendijo. Luego, en un giro de los acontecimientos, fue acusado falsamente de algo que no hizo. ¿Qué crees que estaba pensando José? ¿Parece que continuó viviendo su fe? ¿Cómo siguió José dando los siguientes pasos correctos?
Nota para el líder: José enfrentó oposición, retrasos, desilusión y desánimo en su fe. Las Escrituras nos muestran que siguió haciendo lo correcto y que Dios estaba con él.
10. Lea Génesis 41:40 y Génesis 45:5-8. En la situación de José, ¿puede ver cumplido su sueño o plan para su vida? ¿Podría José haber permitido que el desaliento y las demoras crearan incredulidad en su vida y situación? ¿Cómo puede la historia de José animarnos a vivir nuestra fe y creer en Dios incluso cuando no podemos ver la promesa?
Nota para el líder: Dios sacó a José del hoyo, a la prisión, al palacio, y usó su fe para cumplir su plan. Sin fe no podemos agradar a Dios. “Dios, ayúdanos a tomar medidas en nuestra vida para crecer y ejercitar nuestra fe. Deseamos complacerte. Ayuda nuestra incredulidad. Amén."