Guía del Líder
La Navidad puede ser una época de frustración. Todo el mundo tiene un plan. Cada uno tiene sus propias expectativas o tradiciones. Nuestras vidas se pueden vivir en un ciclo de lo que quiero, merezco, espero... y nos enojamos por lo que no salió según lo planeado. El ego dice que debemos ser tratados de cierta manera, y cuando no lo somos, surgen los problemas. La humildad es perdonar a quienes nos han hecho daño y ofrecerles ayuda y sanidad, como la sirvienta, como Jesús. En esta temporada navideña, sigamos el ejemplo del Rey Siervo que, aunque estaba por encima de todo, por nosotros se hizo por encima de nada.
Lo que necesitará: Una Biblia o su aplicación de la Biblia, un cuaderno, un bolígrafo y un marcador. Los siguientes versículos resaltados para usted están enlazados para que pueda acceder a ellos fácilmente durante su tiempo de estudio.
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Líder: Esta sección está diseñada para iniciar discusiones, examinar la verdad de Dios y aplícala a nuestra semana. Los líderes de grupo de vida no deben asumir que todos en su grupo son seguidores de Cristo. Debido a que él / ella está participando en un grupo de vida, él / ella puede estar abierto a conocer más y explorar. Ore para que el Espíritu Santo trabaje y deje que Él también lo guíe.
1. ¿Qué es lo que más disfrutas de la Navidad? ¿Qué parte de la temporada navideña te frustra?
2. Lea 2 Reyes 5:1-9. ¿Cuál es la historia de fondo de Naamán? ¿Por qué no es expulsado de la sociedad por ser leproso? ¿De dónde sacó un rayo de esperanza? ¿Crees que su éxito influyó en sus respuestas en el resto de la historia? Considere: ¿sus éxitos / su ego influye en la forma en que responde a los demás?
Nota para el líder: Naamán fue un comandante exitoso que también se ocupó de la lepra. Aunque debería haber sido un marginado, su éxito le permitió ser aceptado por la sociedad. En ese sentido estaba un poco “por encima de la ley”. Su pequeña sirvienta le sugirió ver al profeta Eliseo, quien podría curarlo. Es importante señalar que ella fue llevada cautiva, probablemente vio cómo mataban a su familia, pero ella le dio buenos y piadosos consejos.
3. El ego dice: "La gente debería tratarme de cierta manera." Lea 2 Reyes 5:10-12. ¿Cómo deseaba Naamán ser tratado? ¿Qué frustró a Naamán acerca de cómo y qué le dijeron? ¿Qué procede a hacer en el versículo 12? Considere: ¿Cuándo sus expectativas le hacen la vida difícil a usted o a los demás? Por el contrario, Jesús realmente fue insultado. Tenía todo el derecho a sentirse ofendido. ¿Cuál fue su respuesta tal como se encuentra en 1 Pedro 2:23?
Nota para el líder: Después de viajar millas, se siente ofendido por la respuesta que recibió de uno de los mensajeros de Eliseo. Se siente ofendido por haber venido hasta aquí, haber traído todos estos regalos y Eliseo ni siquiera sale a verlo. Quiere ser tratado como alguien de gran importancia. Cuando escucha una respuesta sencilla, su orgullo aumenta. No sólo está enojado, sino que comienza a despreciar y juzgar la “receta” de curación que recibió. Denigra al río Jordán como una idea ridícula para una cura. Sus expectativas son la verdadera razón por la que se siente ofendido. A diferencia de Naamán, Jesús fue realmente insultado, herido, condenado injustamente y asesinado. Sin embargo, respondió con humildad y como un verdadero servidor.
4. El ego dice: "Debería hacerse a mi manera." Lee nuevamente la última parte de 2 Reyes 5:12. ¿Qué hizo/no hizo Naamán? ¿Qué actitud le hizo alejarse de la cura prescrita y en realidad le impide ser sanado? Lea Marcos 14:36. Cuando se enfrentó a una situación horrible, un plan que no había elegido, ¿cómo respondió Jesús? ¿Reaccionas más a menudo como Naamán (indignado y exigiendo tus derechos) o como Jesús (obedeciendo humildemente al Padre y confiando en sí mismo al Juez supremo; ver 1 Pedro 2:23 arriba)?
Nota para el líder: Naamán está frustrado. Crea expectativas en su cabeza antes de llegar. La cultura afirma nuestras expectativas y que tenemos ciertos derechos. El orgullo de Naamán y su incapacidad para meterse en el agua sucia sólo porque alguien se lo dijo, casi impidieron que fuera sanado. No confiaba en el proceso, ni en el profeta ni en Dios. Por el contrario, Jesús enfrentó la muerte y dijo: “no lo que yo quiero, sino lo que tú quieras” es lo que quiero. Confió en que Dios haría Su voluntad. Naamán finalmente fue sanado porque se dejó convencer y abandonó sus expectativas. No estuvo a la altura de la humildad y obediencia de Jesús (ni siquiera de la sirvienta). Sin embargo, escuchar a sus sirvientes y seguir adelante con las instrucciones de Eliseo, a pesar de que estaba frustrado, fue suficiente, ¡y esas son buenas noticias para nosotros!
4. El ego dice: "Estoy por encima de ciertas cosas." Lea 2 Reyes 5:13-14 y Mateo 20:28. ¿Cuál es la perspectiva de los sirvientes? ¿Cuál es el resultado de la obediencia de Naamán? ¿Cómo refutó Jesús completamente la idea de que Él estaba por encima de ciertas cosas? Lea Filipenses 2:5-8. ¿Cómo o qué posición/postura necesitas rechazar?
Nota para el líder: Cuando los sirvientes convencieron a Naamán de que no era un sacrificio tan difícil lavarse en el río si en realidad podía ser limpiado y sanado, él cedió. Siguió las instrucciones, incluso si tenía razón en que era un río sucio y en que no parecía una gran cura. Él simplemente obedeció. Jesús, de la misma manera, rechazó todo lo que merecía –honor, gloria, poder– e hizo el trabajo duro, cruel y sucio de venir a la tierra, muriendo por nuestros pecados, porque Dios se lo pidió. Se hizo nada, renunciando a sus privilegios y despojándose de sus poderes divinos, todo por nosotros.
6. Lea 2 Reyes 5:15-16. ¿Cuál es la respuesta natural de Naamán a su curación? ¿Cómo intenta pagarle a Eliseo? ¿En qué se parece la respuesta de Eliseo a la respuesta del Señor cuando tratamos de pagar por nuestro pecado o ganarnos la salvación? ¿Cómo es la joven sirvienta un presagio de la obra de Jesús en nuestras vidas?
Nota para el líder: Naamán recibe un regalo, pero inmediatamente quiere pagar por él. Eliseo se negó a aceptar pago por algo que Dios había hecho. De la misma manera, se nos ofrece el regalo gratuito de la salvación que tampoco podemos pagar. Cuando hacemos buenas obras y obedecemos la voluntad de Dios, incluso entonces nuestras obras deben ser producidas por amor y gratitud, no por tratar de pagarle a Dios por lo que ha hecho por nosotros. Este también fue un gran sacrificio para la pequeña sirvienta. Naamán arruinó su vida. Sin embargo, debido a su obediencia a Dios, permitió que Dios obrara a través de ella. Naamán recibió un milagro de perdón, cuidado y sanidad a través de ella. Los otros sirvientes también solían instarlo a la humildad, probablemente porque no tenían derecho, estaban acostumbrados a hacer las cosas a su manera, o a ser valorados, escuchados o tenidos en alta estima cuando hacían sus propios planes. Jesús dice que ellos son los que lo entendieron.
Líder, quizás quieras leer esta cita de la Biblia de la Historia de Jesús utilizada en el mensaje:
“Y así fue que un hombre muy enfermo fue sanado, todo gracias a una sirvienta que lo perdonó.
“Dios sabía que el pecado era como la lepra. Impedía que los corazones de sus hijos funcionaran correctamente y al final los mataría. Años más tarde, Dios iba a enviar otro Siervo, para perdonar como ella, para perdonar a todos los hijos de Dios y sanar la terrible enfermedad de sus corazones.
“Sus corazones estaban rotos. Pero Dios puede reparar los corazones rotos”.
5. Ore: Dios, quiero darme cuenta de mis actitudes de derecho y alejarme de ellas. Sé que todos somos creados iguales, hermosos a tus ojos. Todos necesitamos sanidad que sólo Tú puedes darnos a través de la sangre de Tu Hijo, Jesús. Ayúdame a liberar mis planes, mis expectativas, mis derechos... y estar listo para recibir de Ti o para servir como Tú me guíes. Acudo con valentía a Ti, pidiendo Tu ayuda y cambio en mi situación. Pero no mi voluntad, sino la tuya. Estoy dispuesto a confiar y obedecer. En el nombre de Jesús. Amén.
Profundizar
Líderes: Esta sección está diseñada para uso posterior en su grupo de vida o para su estudio personal. Estos también se pueden utilizar como puntos de discusión y formas de mantenerse conectado con su grupo durante toda la semana. Anime a su grupo a tomarse un tiempo todos los días para analizar estas preguntas.
7. ¿Qué atributos del Rey Siervo venidero encuentras en estos pasajes del Antiguo Testamento? En su opinión, ¿fueron cumplidas por Jesús, el Mesías?
a. Lea Isaías 49:3-7. b. Lea Isaías 53.
8. ¿Qué atributos muestra Jesús? ¿Qué principios nos enseñó a aplicar en nuestra vida?
a. Lea Juan 13:1-17. d. Lea Mateo 20:26-28.
b. Lea Marcos 10:35-45. e. Lea 1 Pedro 2:22-23.
c. Lea Lucas 22:24-27. f. Lea Hebreos 2:17-18.