Guía del Líder
A menudo hablamos del Nuevo Pacto como mucho más simple que el Antiguo Testamento con todas sus muchas leyes. ¡Pero en todos los casos, Jesús hizo que obedecer a Dios fuera menos complicado y más difícil! Sus estándares, para todo, desde nuestras acciones hasta nuestros pensamientos y motivaciones, son más estrictos que un conjunto de leyes y comportamientos. ¡Pero Jesús nos muestra el camino y nos capacita para amar a los demás!
Lo que necesitará: Una Biblia o su aplicación de la Biblia, un cuaderno, un bolígrafo y un marcador. Los siguientes versículos resaltados para usted están enlazados para que pueda acceder a ellos fácilmente durante su tiempo de estudio.
Inicio
Líder: Esta sección está diseñada para iniciar discusiones, examinar la verdad de Dios y aplícala a nuestra semana. Los líderes de grupo de vida no deben asumir que todos en su grupo son seguidores de Cristo. Debido a que él / ella está participando en un grupo de vida, él / ella puede estar abierto a conocer más y explorar. Ore para que el Espíritu Santo trabaje y deje que Él también lo guíe.1. ¿Con qué frecuencia usa la palabra “amor”? ¿Solo la usa para personas, o incluye mascotas, comida, películas, música, etc.?
2. Lea Juan 13:34-35. Conocemos la palabra “amor”, pero a menudo no sabemos cómo amar a los demás bien o en absoluto. ¿Qué mandato simple dio Jesús? ¿Qué hace que esto sea difícil? ¿Cuán importante es que obedezcamos este mandamiento?
Nota para el líder: Simplemente, amen “como yo los he amado”. ¡Eso es difícil! El amor de Jesús fue incondicional, sacrificado hasta la muerte, perdonador, misericordioso y eterno. Por otro lado, nos ofendemos fácilmente, queremos amor recíproco y guardamos rencor. Pero el amor es la característica que mostrará a los demás que pertenecemos a Dios.
3. Lea 1 Juan 4:7-8. ¿Qué frases le parecen duras o ásperas? ¿Le parece posible amar a los demás? ¿Como podemos hacerlo?
Nota para el líder: "Amaos los unos a los otros" no da una "salida", no nos libera de amar a los locos o incluso a nuestros enemigos. “El que no ama no ha conocido a Dios” es duro y muy claro. ¡Si no mostramos amor, NO conocemos a Dios, ¡porque el amor es un Fruto del Espíritu si estamos caminando cerca de Dios! Si no amamos a los demás, Él no es nuestro Señor y no le obedecemos. No podemos hacer esto con nuestras propias fuerzas, pero podemos amarlos a través del poder del Espíritu.
4. El amor requiere paciencia y bondad. Lea 1 Corintios 13:4-7 y 2 Pedro 3:9. ¿Qué área de su vida requiere rutinariamente más paciencia y gracia? ¿Cómo puede cambiar la conversación o la situación? ¿Tiene el poder para hacer esto?
Nota para el líder: Como en el ejemplo del mensaje, ¡la gracia, la gratitud y la ayuda ofrecidas a la persona que paga nos cambia a nosotros más que a ellos! Tómese diez segundos para orar: “Dios esté presente en este momento”. Eso cambiará su actitud. Pregúntele a Dios: "¿Cómo le sirvo?" Pregúntale qué requiere el amor de usted en esa situación exacta. Recuerde, tiene el poder del Espíritu Santo para ayudarle a amar en ese instante y en curso. El amor de Dios es paciente y bondadoso.
5. El amor requiere humildad y sacrificio. Lea Filipenses 2:3-7. ¿Qué actitud tenía Jesús? ¿Qué pasaría en nuestras relaciones matrimoniales, relaciones padres/hijos, relaciones laborales o escolares, si oráramos y pidiéramos por la misma actitud que tuvo Jesús? ¿A quién considera “menos que” y necesita elevar en su estimación, amor y en sus acciones? ¿Cómo cambiaría su vida convertirse a sí mismo en nada?
Nota para el líder: Jesús es el máximo ejemplo de humildad, un ejemplo que ni siquiera los más mansos entre nosotros alcanzarán. Pero podemos avanzar hacia la humildad al considerar la forma en que Jesús vivió y el sacrificio que hizo al hacerse completamente humano por nosotros. También podemos recordar cómo las Escrituras nos dicen que seamos más como Él (1 Juan 2:6).
6. Paso de acción: La gente sabe que usted los ama cuando actúa con amor. ¿Por qué vale la pena, incluso cuando parecen desagradables? ¿Puede comprometerse a amar no solo a amigos y familiares, sino también a encuentros casuales e incluso a "enemigos" esta semana? El mundo necesita el amor de Jesús, y comienza con nosotros.
Profundizar
Líderes: Esta sección está diseñada para uso posterior en su grupo de vida o para su estudio personal. Estos también se pueden utilizar como puntos de discusión y formas de mantenerse conectado con su grupo durante toda la semana. Anime a su grupo a tomarse un tiempo todos los días para analizar estas preguntas.7.
Lea Filipenses 2:3-7. La humildad no se trata de autodesprecio, falta de confianza o baja autoestima. La humildad no es pensar menos de sí mismo; la humildad es pensar menos en sí mismo. ¿Qué conceptos erróneos ha tenido en el pasado acerca de lo que significa ser humilde? Según
Filipenses 2:3-4, ¿cómo podemos demostrar humildad?
Nota para el líder: Recuerde que la humildad no significa tener pensamientos de autodesprecio sobre nosotros mismos; simplemente se está enfocando menos en nosotros mismos y más en Cristo y en los demás. Todos nacemos ensimismados, pero a través del ejemplo de Jesús, podemos aprender a caminar con humildad.
8. Lea Proverbios 11:2, Jeremías 9:23 y Romanos 12:3. El orgullo es enemigo de la humildad. Una buena manera de averiguar dónde puede estar luchando con el orgullo es pensar en las áreas en las que tiende a juzgar más a los demás. ¿Cuándo tiende a juzgarlos? ¿Qué revela esto acerca de sus oportunidades para crecer en humildad?
Nota del líder: La Biblia nos dice que Dios “se opone a los soberbios” (1 Pedro 5:5), y que el orgullo en nuestros corazones hará que seamos ciegos a la bondad de Dios (Salmo 10:3-4). La Escritura menciona repetidamente el orgullo como un rasgo de carácter destructivo. Ser humilde significa tener conciencia de que todo lo bueno en nuestra vida viene de Dios (ver Santiago 1:17, 2 Corintios 10:17-18).
9. Las Escrituras nos recuerdan que, para ser siervos de Cristo, debemos priorizar la búsqueda de la aprobación de Dios, no de otras personas (Gálatas 1:10). Mientras estudia la humildad, piense en las circunstancias en las que busca la alabanza del hombre y no la de Dios. ¿Está dispuesto (o es capaz) de dejar la idea del reconocimiento terrenal para ser más como Jesús? Considere las formas en que Dios puede estar llamándolo a abandonar su orgullo y seguirlo en humildad. Compártalas con su Grupo de Vida o con un mentor cristiano o amigo que pueda orar con usted.